viernes, 2 de febrero de 2018

Presentación del Material

Santidad y Cultura Hebrea para la Nueva Simiente de Venezuela
Enseñanza de la Cultura hebrea que está impregnada en el hebreo antiguo

Introducción
            En este tiempo el Eterno desea levantar en Venezuela una nueva simiente Jer 31:27-28, una nueva generación de venezolanos que sean santos y que por tanto entiendan más su santidad. El Eterno nos reveló que para cumplir este propósito era necesario que su remanente y todos los que quieran formar parte de su reino en esta nación, aprendan el hebreo que hablaban y leían nuestros padres. El Eterno nos reveló que el propósito no era aprender un nuevo idioma, como el que aprende el inglés o el francés, porque muchos en el mundo leen, hablan y escriben en hebreo (moderno), pero no conocen la cultura de nuestros padres. La cultura de nuestros padres (hebrea) es una cultura santa y ella el Eterno la revela a través de la lengua hebrea antigua, por eso es necesario que aquel que estudia el hebreo, se interese más en aprender la cultura que ella enseña, que en aprender un idioma más.

            El propósito de este material es enseñar parte de las revelaciones que hemos recibido acerca de la cultura que enseña la lengua hebrea. Cabe destacar, que si nosotros aprendemos esta cultura, entonces aprenderemos a pensar como pensaban nuestros padres Abraham, Isaac, Jacob y sus hijos, quienes eran siervos santos del Eterno, y quienes además escribieron las Sagradas Escrituras con el propósito de enseñar santidad a las futuras generaciones.   


La enseñanza de este vídeo es una revelación profética sobre la importancia del hebreo para la Nueva Venezuela


Orígenes del hebreo
El hebreo es el idioma que el Eterno enseñó desde el principio a nuestros primeros padres Adán y Eva, y era la única lengua que se hablaba en la tierra Gén 11:1. El propósito del Eterno era que Adán y sus hijos fueran santos y por eso les dejó como legado una lengua santa. Cuando el Eterno confundió las lenguas por causa de la rebelión ocurrida en la torre de Babel Gén 11:7-8, surgieron muchas lenguas distintas de donde provienen hoy idiomas como: el chino, el inglés, el alemán, el español, etc. Sin embargo, el Eterno dejó a su linaje escogido, es decir, a los hijos de Sem y de Abraham, la lengua hebrea que hablaban Noé, Enoc, Set y Adán porque en ella estaba impregnada una cultura de santidad.
El hebreo formó parte de un conjunto de lenguas conocidas hoy como lenguas semíticas (Sem), estando entre ellas: un conjunto de lenguas cercanas conocidas como cananeas Isa 19:18, entre las cuales estaban: la moabita, amonita, el fenicio, púnico, la edomita y el hebreo. Formaban parte también de las lenguas semíticas, otras lenguas como: el acadio, el arameo, el árabe y otras más.

En el pasado, nuestros ancestros hebreos fueron desterrados a otras naciones por haberse rebelado al Eterno y a sus leyes, y allí ellos aprendieron a hablar otras lenguas, por ejemplo, los judíos fueron invadidos por Babilonia y allá aprendieron a hablar y escribir en arameo. Fue tanta la influencia del arameo en nuestros padres, que ellos cambiaron la forma de representar las consonantes de la escritura hebrea, sustituyendo la forma antigua de la escritura hebrea (conocida hoy como el paleo hebreo). En esa nueva forma de representación del alefato (alfabeto hebreo) comenzaron a utilizar los mismos signos lingüísticos del arameo, que son los mismos que se usan hoy. Además parte de los escritos sagrados que se escribieron después del exilio, fueron escritos en arameo, entre ellos, parte de los libros: Daniel y Esdras Dan 2:4, Esd 4:7.



El hebreo que hablaron nuestros padres es una lengua santa
            El hebreo es una lengua creada por el Eterno para su linaje santo, pues fue la lengua que hablaban Adán y todos sus hijos hasta Noé. Como señalamos antes, fue a partir de la confusión de las lenguas Gén 11:6-7 que el hebreo comenzó a hablarse de manera específica por una porción de los hijos de Sem. El Eterno nos reveló que era importante que su linaje escogido de Venezuela  aprendieran a leer, hablar y escribir en esta lengua, porque en muchas palabras de ella está impregnada su santidad y la cultura santa que practicaron nuestros padres, y por tanto, es necesario que su linaje escogido lo conozca y entienda para así poder levantar una nueva simiente santa en nuestra nación Éxo 19:5-6.
            Aquellos siervos del Eterno que nacimos en naciones gentiles, hablamos una lengua pagana y practicamos una cultura propia de la nación, entendiéndose por cultura todo el conjunto de costumbres como: alimentación, vestimenta, música, fiestas, la historia, el conocimiento, la lengua, las leyes, etc. Después que nos convertimos al Señor y comenzamos a ser ciudadanos del reino del Eterno, es necesario que comencemos a aprender el lenguaje autóctono del Reino, es decir, el hebreo (no me refiero al hebreo moderno), porque esta es la única manera como podremos entender la cultura y la santidad que el Eterno reveló a nuestros padres Abraham, Isaac, Jacob y sus hijos en el pasado. Además fue en esa lengua, que los profetas escribieron todos los escritos sagrados y aunque hoy contamos con traducciones, ninguna de ellas es tan perfecta como para que pueda sustituir a la que fue escrita en el idioma original, razón por la cual es necesario que aprendamos esa lengua y así podamos obtener el conocimiento de las grandes verdades de santidad que están en ella.

Algunas características del hebreo antiguo
El hebreo antiguo que hablaban nuestros padres tenía algunas características peculiares que vale la pena mencionar y entender, porque gran parte de las enseñanzas están relacionadas con ellas.
1.    En el español existen pocas palabras que tienen significados distintos, razón por la cual, es necesario leer el contexto para saber su verdadero significado. Por ejemplo: la palabra cola puede hacer referencia a una fila de personas, a la cola de un animal, a un pegamento, a un sujetador de cabello, o a muchos otros significados. El hebreo antiguo se caracteriza porque muchas de sus palabras tienen significados distintos, que aparentemente no guardan ninguna relación entre sí. El Eterno permitió esta peculiaridad en la lengua hebrea, porque era necesario que nuestros padres relacionaran varios conceptos a una misma palabra, para que por asociación recordaran principios importantes de la cultura santa. Por ejemplo: la palabra hebrea barák (ברך) tiene dos significados distintos: bendecir y arrodillarse. Esto pretendía enseñar a nuestros padres que para bendecir es necesario arrodillarse (humillarse) y que para ser bendecidos también es necesario humillarse. Cada vez que en un texto hebreo aparecía esta palabra, nuestros padres traían a memoria los dos conceptos y también su asociación.
2.    En el español normalmente las palabras que se derivan de una raíz común. están relacionadas entre sí. Por ejemplo: los sustantivos: florero, floristería, floral y el verbo florecer se derivan todas de la palabra “flor” y todas ellas están relacionadas con su raíz. El hebreo antiguo tiene la peculiaridad que muchas de sus  palabras que provienen de una misma raíz, no presentan relación alguna aparente. Sin embargo, todas ellas juntas tienen como propósito dar una enseñanza magistral que está relacionada con la santidad y la cultura santa. Por ejemplo, la palabra hebrea  barák (ברך) que significa tanto bendecir como arrodillarse, se deriva de la palabra hebrea bará (ברא) que tiene por significado crear (entre otros). Estas dos palabras pretenden dar una gran enseñanza: que el Eterno creó el hombre para bendecirlo Gén 1:27-28, pero éste para ser bendecido tiene antes que arrodillarse o humillarse delante de Él.
3.    En el hebreo muchas palabras tienen un significado literal y otro figurado y es importante tener en cuenta los dos significados, pues en algunos textos de la Sagrada Escritura se usan las palabras en un sentido literal y en otros en un sentido figurado. El Eterno al crear el lenguaje hebreo usó esta característica con el propósito de darnos grandes enseñanzas. Por ejemplo: la palabra hebrea kiliá (כּליה) de su sentido literal significa “riñon” Lev 3:4, pero en un sentido figurado significa: mente, corazón, pensamiento Sal 26:2, Sal 73:21.

Enseñanzas de la cultura santa a través de algunas palabras

En las demás paginas de este blog presentaremos algunas enseñanzas que nos han sido reveladas por nuestro Dios y Padre, las cuales están enumeradas usando el sistema de numeración hebreo para párrafos. 

Las palabras hebreas estudias y presentadas en este material fueron tomadas  de el Diccionario Strong de Palabras Originales del Antiguo y Nuevo Testamento. (2002) Editorial Caribe, Inc. Edición editada y corregida en agosto de 2003.
No se desanime porque vea pocas enseñanzas, pues aun estamos escribiendo y recibiendo revelación de nuevas enseñanzas. Shalóm.
En los siguientes enlaces podrán descargar cursos escritos de hebreo bíblico, para aquellos que desean obedecer el mandato del Eterno y aprender esta lengua santa.
http://www.iglesiareformada.com/HEBREO_BIBLICO.pdf
https://mintsespanol.com/espana/hebreo.pdf
http://www.iglesiareformada.com/Chavez_diccionario_hebreo_biblico.pdf